Plataformas: PC
Versión recomendada: PC
Año en que salió: 2001
Puedes conseguirlo en: GOG
Extras: Ninguno
Discutimos hoy sobre una de esas joyas videojueguiles que de vez en cuando (cada vez más a menudo) nos brindan nuestros estudios españoles. Si no somos grandes productores de videojuegos, pero cuándo nos ponemos sacamos al mercado verdaderas joyas. Blade, también conocido como Severance en algunos países, es uno de esos casos. El juego lo hizo Rebel Act, un equipo de gente novel que presentó el titulo por primera vez en 1996 en la feria tecnológica de Madrid SIMO. Tras un proceso de cuatro años, con perdida de distribuidora internacional, actualización del motor del juego y otras penurias, el titulo vio la luz en 2001 y pegó fuerte. Pegó muy fuerte. Blade era un juego difícil, adictivo, innovador y bellísimo gráficamente si podías moverlo. Pero hablemos más detalladamente de él. Empieza nuestra recomendación.
NARRATIVA
La historia del juego nos narra la clásica historia de fantasía del bien contra el mal. Hace tiempo el caballero Eresh Kigal fue favorecido por la diosa Ianna con la espada sagrada. De esta manera lo convirtió en su campeón y junto a sus compañeros y un gran ejercitó marchó para derrotar en batalla al Señor del Caos. Por supuesto Eresh Kigal prevaleció pero acabó muriendo en cama, entre sus compañeros. Fue enterrado en el Templo de Ianna y sobre su tumba clavaron la espada sagrada. Temiendo sus compañeros que al retornar el Señor del Caos intentara hacerse con el poder del arma decidieron encerrar su poder en gemas y repartirlas por el mundo. Hoy, mucho tiempo después Dal Gurak, Señor del Caos, ha vuelto y planea poseer la espada y su poder para subyugar a toda la creación bajo su puño maligno.
Para hacerle frente cuatro valientes se han decidido a dar el primer paso, Nagflar, el enano, Zoe, la amazona, Tukaram, el bárbaro y Sargon, el caballero. Tu misión será escoger a uno de los cuatro héroes, recuperar la espada y su poder y derrotar a Dal Gurak.
Insisto, la historia de Blade no es nada del otro mundo, es bastante típica y tampoco tiene giros argumentales sorprendentes ni nada de ese estilo. El argumento en sí es meramente testimonial y aunque si que es cierto que se podía haber trabajado más en este aspecto, el juego es lo bastante sólido en sus otros apartados como para seguir siendo una obra notable. Lo dicho el guión es lineal y quizá lo más curioso es el hecho de que las gemas no son obligatorios de obtener y puedes llegar al final del titulo sin ellas, eso sí, la espada sagrada será mucho más débil y no será tan determinante en los combates.
APARTADO AUDIOVISUAL
Dejemoslo claro desde el principio, Blade era una bestia gráfica en la época. Uno de esos juegos con un apartado gráfico de escándalo. Para que os hagáis una idea, cuándo el juego salió, de todo mi grupo de colegas (todos viciados al Counter-Strike en los cibercafés de entonces) yo era el único que tenía un PC capaz de mover el juego con un mínimo aceptable de relación calidad/rendimiento. Eso si mis tiempos de carga eran eternos. Hoy por fortuna ya no tenemos ese problema y podemos disfrutar del juego en todo su esplendor sin mayor problema. Blade sigue luciendo muy bien a pesar de los años y si hay algo que aún hoy se mantiene impactante y de calidad son la sangre y las mutilaciones. Y es que no hemos subtitulado esta recomendación "sangría española" por nada. Blade es un juego en el que la sangre abunda y mucho. Gracias a su sistema de esqueletos y su sistema de fluidos el motor gráfico permite mostrarnos decapitaciones, desmembramientos y reacciones realistas ante éstos; como sangre que sale a chorros unido a animaciones efectivas. Esto afecta también a nuestro protagonista, que a medida que reciba daño veremos como su modelo se llena de heridas sangrantes que desaparecerán cuándo nos curemos.
Por si fuera poco los escenarios, aunque lineales, eran enormes, variados y muy bonitos; especialmente se beneficiaban de un gran sistema de iluminación (el juego con la luz de hogueras en cuevas es especialmente bello) y unos preciosistas y muy avanzado sistema de reflejos en el agua. Basten las imágenes de este análisis para ver una muestra.
Especial mención quiero hacer aquí al bestiario del juego, abrumador. No se puede acusar a Blade de tener pocos enemigos: orcos, caballeros negros, minotauros, vampiros, golems, demonios, etc, etc.
Todos ellos modelados de genial manera (bueno quizá el diseño de los orcos es un poco cutre) y con animaciones diferenciadas y realistas.
Como último apunte añadido los efectos de hechizos, bueno, realmente de auras y efectos especiales de las armas, pues el juego carece de alguna clase mago o hechicero al uso. Todos ellos son notables, salvo las auras, que a título personal me parecen meramente aceptables (parece un escudo de fuerza alrededor del personaje de algún color).
En el audio Blade es un juego sobresaliente. Aunque los personajes no hablan, el doblaje del narrador es muy bueno y cumple perfectamente su cometido. La banda sonora por otro lado es orquestal y magnífica. Aunque en algún corte goza de algo de epicidad por lo general las composiciones suenan más intimistas, más oscuras, en la línea también visual del juego de un mundo oscuro y siniestro.
JUGABILIDAD
Blade es una especia de fusión entre un RPG y un Hack & Slash. No podemos considerar el juego como un Action RPG pues no tiene ese elemento propio de la búsqueda de botín continúa, de hecho en Blade no existe como tal esa faceta. Su faceta de RPG la encontramos en el hecho de que nuestro personaje ganará experiencia y subirá niveles, tendrá diversas características que irán aumentando automáticamente y a lo largo de la aventura iremos encontrando nuevas armas que empuñar. Ahí termina toda su faceta de RPG, su faceta Hack & Slash o de aventura de acción es el resto del juego. Sin embargo aunque usemos esos términos os engañáis si pensáis que Blade es un juego como Devil May Cry o God of War; es mucho más parecido al actual Dark Souls, tal y como reconoció uno de sus creadores hace unos días. Encararemos a los enemigos y blandiendo nuestra arma mediante defensa y combos les daremos muerte. Para realizar los ataques tendremos una barra de fatiga que si se vacía nos dejará vendidos ante los ataques enemigos, además los escudos pueden romperse y defender con las armas exige hacer paradas en el momento justo. Todo esto combinado construye un sistema de combate difícil que nos exigirá dar lo mejor de nosotros en cada enfrentamiento y luchar con cabeza en vez de a lo loco. Tal y como Dark Souls hoy en día.
Manejar cada personaje es diferente y aunque todos pueden usar todas las armas, los combos y por ende el potencial de esas armas solo podrá desbloquearlo determinado personaje; esto es el bárbaro y la amazona pueden blandir la espada a dos manos pero solo el bárbaro puede valerse de los combos y sacarle el máximo partido, sin contar que blandir ese arma fatigaría muy rápido a la amazona.
Como mencionábamos en el apartado audiovisual, Blade goza de un sistema de desmembramientos que afecta a tus enemigos y a ti, con la excepción de los jefes. Esto abre un nuevo abanico de posiblidades, y no solo en el hecho de matar a tu enemigo antes, sino que al poder coger y usar como arma cualquier elemento del escenario (si, puedes atacar con un taburete) podemos matar a los enemigos con su propio brazo cercenado. También podemos lanzar cualquier elemento que sujetemos, por lo que podemos matar a un enemigo a distancia lanzándole espadas.
El juego está dividido en 13 fases más un nivel oculto. El primer nivel es único y diferente para cada personaje pero el resto son comunes. El diseño de los mismos es exquisito y son literalmente enormes. Aunque lineales también tienen alguna zona semi secreta que explorar. Eso sí por lineales no entendáis que os llevan de la mano hacia delante todo el rato sino que no hay un mundo abierto por explorar. A parte de los combates los escenarios están llenos de trampas y algunos puzzles por resolver.
Para curarnos tendremos que usar la comida que encontremos con el escenario, que no se puede guardar, o pociones, mas limitadas y almacenables.
Todos estos elementos hacen de la jugabilidad de Blade su apartado más destacable con diferencia; difícil, profundo, cautivador y adictivo.
Hasta aquí nuestra recomendación de esta joya española del pasado. Solo nos queda deciros que si os a gustado lo compréis en GOG, tienda digital en la que está disponible actualmente. Nos vemos en próximas recomendaciones.
Pues por desgracia no jugué casi nada al Blade en su día, creo que andaba a otros juegos y éste llegué a probarlo en casa de un amigo, pero nada más. Así que en cuanto pueda, me meto al GOG y a ver si está de ofertilla o a buen precio. Que por todo lo que cuentas, la pinta es muy buena.
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